Culpas compartidas (Hjorth & Rosenfeldt)

Octava entrega de la serie protagonizada por el psicólogo criminal Sebastian Bergman. En esta ocasión el inicio del relato se asemeja más bien a un final: tras salir a la luz que uno de los miembros de la Unidad de Homicidios resultó ser un asesino en serie (léase Verdades enterradas), el futuro del equipo de investigadores está en el aire. Con dos nuevos miembros, la Unidad acude al escenario de un crimen en la localidad de Västerås, que es nada menos que el pueblo natal de Sebastian. No solo eso: la víctima es una mujer de la misma edad que el psicólogo y estudió en el mismo instituto, aunque no fueron compañeros de clase. Y para dejar claro que no se trata de ninguna casualidad, el autor o autores del crimen dejaron un mensaje en una pared cercana: "RESUELVE ESTO, SEBASTIAN BERGMAN".

Como reza un dicho popular, las desgracias nunca viene solas. Mientras indagan en el pasado de la víctima y cómo sus vínculos con Sebastian la convirtieron en el blanco de un asesino en serie, se produce un nuevo crimen. En este caso la víctima es un hombre y su cuerpo ha aparecido en el interior de un autobús estacionado en una cochera. Pero lo más extraño es que el asesino extrajo el corazón de la víctima, tal y como sucedió en el primen crimen que Sebastian investigó junto a la Unidad de Homicidios (léase Secretos imperfectos).

Con trece años de investigación a sus espaldas, este singular equipo de investigadores no ha perdido facultades, lo cual será importante a la hora de tratar de parar los pies a un asesino en serie que por algún motivo está obsesionado con uno de los suyos. El resultado es un relato de lo más intenso que ningún seguidor de la serie querrá perderse.