Esta vez es Bosch quien selecciona el caso que les ocupará: el de una mujer que lleva más de cinco años en prisión tras ser acusada del asesinato de su marido, un ayudante del sheriff del condado de Los Ángeles. El caso no llegó a juicio: la rea aceptó un acuerdo para cumplir una condena reducida, aunque no se declaró culpable del cargo. Tras revisar el expediente, Bosch ve demasiados agujeros. Por ejemplo, el arma del crimen nunca apareció. El expolicía cree que tras el crimen hay algo que la fiscalía quería evitar que saliera a la luz y por eso forzaron a la mujer a aceptar el acuerdo.
Una vez más el autor hace formar equipo a sus dos personajes más populares con excelentes resultados, a pesar de que continuamente manifiestan que sus conceptos de lo que es la justicia son muy diferentes.

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